Nuestro Proyecto en Honduras

Nuestro proyecto en Honduras
Proyecto Populorum Progressio

Partimos para Honduras, con la idea de compartir algo de nosotros, nuestro tiempo, quizás que sea una de las cosas más valiosas que poseemos. Y lo haremos durante un periodo escolar, que en Honduras se inicia en el mes de Febrero y tiene su fin en el mes de Diciembre. Durante este año intentaremos que los jóvenes con los que convivimos, puedan sacar lo mejor de sí mismos y adquirir toda la formación necesaria para potenciar y desarrollar sus comunidades.
Por ello este proyecto se llama Populorum Progressio o lo que es lo mismo “El desarrollo de los pueblos”.

¿A quien está dirigido el proyecto Populorum Progressio?

El proyecto va dirigido a jóvenes de escasos recursos económicos, procedentes comunidades rurales indígenas de toda la geografía de Honduras, a fin de que puedan formarse de una manera integral sirviendo de elementos dinamizadores del desarrollo de sus aldeas de origen.

¿Qué buscamos?

Buscamos motivarles haciéndoles partícipes de la realidad de su pueblo, concienciándolos de que la desigualdad de que son víctimas no es un capricho del destino, sino que pertenecen a un país de incontables recursos, pero donde la riqueza está injustamente repartida.

Intentamos que estos jóvenes se formen de una manera integral. Por un lado recibiendo una educación académica y por otro lado con una formación en valores humanos y solidarios que haga de ellos unos buenos líderes y poco a poco motores de desarrollo de sus comunidades.

¿Dónde estaremos este año?

Estaremos en Copan Ruinas muy cerquita de Guatemala, un pueblecito muy conocido por sus ruinas mayas, siendo uno de los puntos de mayor atracción turística de toda Honduras. Aunque puede parecer muy extenso el territorio geográfico de Honduras, podríamos decir que la extensión es un poco más grande que la que puede tener Cataluña.

En el mapa podemos ver los diferentes departamentos en los que está dividida Honduras. La capital, Tegucigalpa, se encuentra en el Departamento de Francisco Morazán y aunque las distancias nos pueden engañar, desde Tegucigalpa a Copán hay 7 horas de camino. (Las carreteras son las que son….)

La casa está situada a las afueras del pueblo, y muy cerca del instituto. Como se puede ver el entorno es muy natural.

Es una casa recién construida, y fue en el 2007 cuando por primera vez empezaron los chicos a residir en ella. Tiene una capacidad para unos 40 jóvenes, aunque nosotros actualmente sólo contamos con una veintena. Quizás con el tiempo podamos ser más. Los jóvenes que viven en ella, son jóvenes de diferentes comunidades indígenas del departamento de Copán.

Estos son algunos de los jóvenes con los que conviviremos en la casa.

Para estos chicos supone un cambio brutal, pasar de vivir en una comunidad perdida entre las montañas, donde no existe la luz y en la mayoría de ellos ni siquiera el agua corriente, a vivir en una casa donde tienen que estudiar, ir al colegio, implicarse en proyectos de ayuda a sus comunidades, etc.,

Los varones hijos de una sociedad tan machista se ven implicados en tareas tales, como hacer la comida, o limpiar, algo impensable para un hombre en Honduras. Y las mujeres empiezan a compartir responsabilidades en la dirección y administración de la casa y en los diferentes proyectos que de normal quedarían relegadas a los varones.

Llegar a sus comunidades no es nada fácil pues hay que caminar varias horas en muchas ocasiones para llegar donde ellos viven.

Zacarías, con sus hermanos

Magdalena con su familia (la segunda por la derecha)

La Mama y el Hermano de Lorena pelando café.

Subiendo a la comunidad de San Antonio del Norte con Zacarías y Eliú.

Llevando mesas donada por el colegio de Mariona (Canigó) a la comunidad de Lorena para el proyecto de Maestro en Casa.

En la casa ellos eligen a 3 responsables, que se encargarán de la administración, compras y todo lo que implica el funcionamiento de la casa.

Se encargan de los diferentes proyectos que se llevan en las comunidades cercanas. Así son ellos los que se encargan de recoger las cartas, certificados y fotos de los niños becados que luego llegan España.

Eliú y Lorena creando nuevas fichas de niños becados que luego llegarán a España en busca de padrinos.

Ever, impartiendo clases de informática en la casa.

Los sábados chicos de comunidades bajan y son los jóvenes quienes enseñan lo que ellos aprendieron.

Los jóvenes de la casa cultivan maíz en el terreno de la casa. El maíz es un alimento básico en Honduras, con él luego elaboran unas tortillas que es el sustitutivo del pan en España y se come a todas horas.

Plantación de maíz del año pasado.

Estos son los jóvenes de todo el proyecto Populorum Progressio que terminaron el curso 2007, nosotros estamos en una de las 8 casas que están funcionando.

Apostamos por el proyecto porque pensamos que todos tenemos derecho a una educación, porque creemos realmente que ellos pueden ser motores de desarrollo de sus pueblos, pero que necesitan ser formados y motivados.

Existen muchas dificultades porque las leyes en Honduras ponen muchas trabas para que los pobres puedan estudiar, y mucho más si hablamos de niveles altos de enseñanza como la universidad. A muchos de estos chicos no los dejan estudiar la secundaria de forma presencial porque con 17 años ya se les considera mayores y que han perdido el tiempo de estudio.

Luchamos para que estos jóvenes se den cuenta de las desigualdades que sufren, y tomen conciencia de lo importante que es tener un nivel de formación adecuado que haga mejorar su calidad de vida y la de sus comunidades.